Una de las bebidas más consumidas en Colombia y en el mundo es el
café, ya que
es el acompañante perfecto para el desayuno, las medias nueves o una charla con amigos.
A pesar de que una de las formas que más se consume el café es el tinto, esta bebida ha tomado tanta popularidad que ya se encuentra en diferentes presentaciones como el granizado, el capuchino, entre otros.
Para muchos, el café instantáneo se ha convertido en una solución rápida en los momentos en los cuales requieren de una chispa de energía en su trabajo o estudio, sin embargo, existe una clara diferencia entre este tipo de café y el molido. Aquí le contamos cuáles son.
El café molido se produce a partir de granos de café frescos que se muelen justo antes de preparar o que se muelen y se empacan para su distribución y venta.
Por otra parte, el café instantáneo se tuesta y se muele previamente y para prepararlo únicamente se le agrega a agua caliente.
De acuerdo con expertos del portal 'Mundo del Café', el café instantáneo puede contener aditivos como crema en polvo, azúcar, entre otros, que pueden aumentar el contenido de calorías.
Asimismo, en el proceso de fabricación de este café se eliminan algunos antioxidantes y nutrientes que de por sí tiene este alimento, lo que puede hacer que el café instantáneo sea menos saludable.
Por ejemplo, este tiene más acrilamida que es una sustancia química que cuando se abusa de ella es potencialmente peligrosa para la salud, según un estudio, además e contener menos porcentaje de cafeína que el molido, es decir, un 30 % menos.
Por el lado del café molido, este, al no ser objeto de procesos industrializados, contiene nutrientes como antioxidantes, potasio, así como también propiedades antibacterianas.
De igual forma, este tipo de café tiene un sabor más fuerte que el instantáneo y tiene otras características que lo hacen más atractivo para algunos, como un mejor sabor y aroma, de acuerdo con el portal 'Foodie after'.
Según la istración de Alimentos y Medicamentos - FDA -, señala que una persona adulta puede tomar hasta 400 miligramos de cafeína al día, es decir, de cuatro a cinco tazas.
Sin embargo, también afirman que hay que tener en cuenta el estado de salud de cada individuo, como por ejemplo las patologías que pueda presentar, como el peso, su estado cardiaco y si está consumiendo medicamentos.
Por lo tanto, es posible concluir que entre estos dos tipos de café el más saludable es el café molido, aunque lo más atractivo del instantáneo sea la rapidez para prepararlo.
LUZ ANGELA DOMÍNGUEZ CORAL
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO
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