Para que las personas mantengan un buen estado de salud, es necesario que cuiden su alimentación y lleven una dieta balanceada, que le aporte al cuerpo los componentes que no puede crear por sí solo. Uno de ellos, por ejemplo, es la lisina.
El portal naturalista ‘Novoma’ describe a la lisina como “un aminoácido que desempeña un papel crucial en muchas de las funciones de nuestro organismo”.
Es un aminoácido esencial, lo que significa que el organismo humano no puede producirlo por sí solo, sino que debe consumirlo en su dieta. Es crucial para la producción corporal de proteínas necesarias para el crecimiento y la reparación de tejidos, y ayuda a formar colágeno y anticuerpos.
Según el portal ‘Herbolario Rosana’, otros estudios han sugerido que la lisina puede ayudar a combatir la ansiedad y el estrés al influir en los niveles cerebrales de serotonina, y mejora la absorción ósea del calcio que entra al cuerpo.
También, por si fuera poco, es esencial en la síntesis de carnitina, compuesto que ayuda a convertir grasas en energía, y puede fortalecer el sistema inmunológico al contribuir a la formación de anticuerpos.
Las principales fuentes de lisina son los productos de origen animal, como las carnes rojas y blancas y la leche. También se puede encontrar en legumbres, frutos secos y semillas.
También, la agencia sa Anses (Agence nationale de sécurité sanitaire de l'alimentation, de l'environnement et du travail) indica que la soya tiene un contenido elevado de este componente.
Por último, explica ‘Novoma’ que la carencia de lisina en la dieta puede traer consecuencias negativas, como el retraso del crecimiento en los niños, problemas en la cicatrización de heridas y debilitación del sistema inmune, lo que causaría que los síntomas de enfermedades comunes se agraven.
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ALEJANDRO VICTORIA TOBÓN
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO
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