Dentro de poco tiempo, los bogotanos empezarán a ver rodando por las calles de la ciudad buses del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) de color verde, aunque siempre han sido azules.
En principio serán pintados nuevamente 583 buses que fueron adquiridos en China por los operadores y que deben entrar en funcionamiento este año. De esos automotores, 462 ya están en el país. De hecho, 371 permanecen desde hace 3 o 4 meses en un patio taller cerca del sector del frigorífico San Martín, en el suroccidente.
La decisión del cambio de imagen de los buses del SITP es porque la alcaldía de Bogotá quiere que los ciudadanos identifiquen los automotores eléctricos y de gas de tecnología Euro VI, que menos contaminan, según le respondió a este diario la empresa TransMilenio.
Pero otros sectores, principalmente del Concejo, consideran que el cambio del color de los buses es motivado por un tema político, y recuerdan que la alcaldesa Claudia López pertenece al partido Alianza Verde.
La decisión le ha generado también críticas a la istración por el costo de esa operación. Volver a pintar cada bus tiene un valor de aproximadamente 9 millones de pesos, para un total de cerca de 5.300 millones.
Según una fuente cercana a los operadores del SITP, se espera que en estos días empiecen a ser llevados los primeros vehículos a la planta de Marco Polo, en la vía Siberia-Cota. De hecho, allí ya están realizando las adecuaciones y recibiendo personal para empezar esa labor. Estos automotores serían del consorcio conformado por Grupo Exprés y Somos K, que no asumirán el costo.
La decisión del cambio a verde se habría tomado hace algunos meses; sin embargo, no se había ejecutado por el costo para la ciudad. Por eso mismo, según trascendió, la alcaldía buscó una empresa que patrocinara la modificación.
Al ser consultado por este diario, Felipe Ramírez, gerente de la empresa TransMilenio, confirmó que se pintará de verde la flota de buses eléctricos y de gas Euro VI y aseguró que ese costo no lo va a asumir la ciudad, sino Enel-Codensa, en principio.
Cabe recordar que el Distrito es socio mayoritario de esta compañía. Enel-Codensa se abstuvo de pronunciarse sobre el cambio de color de los buses del SITP y el propósito.
“El cambio de color no se va a hacer en ninguno de los buses que ya están rodando. Eso es muy importante porque no tiene asociado ningún costo adicional, es sobre buses nuevos que van a entrar, los eléctricos y Euro VI”, explicó.
La idea, agregó, es que los buses eléctricos que se liciten en adelante lleguen a la ciudad con el color verde y no azul. El gerente también aclaró que el proceso de adecuación y preparación de los buses nuevos del SITP para que empiecen a operar “es muy largo” y que, a pesar de la pandemia, “está dentro de los tiempos”. “Siempre hemos dicho que los buses entran a finales de este año y principios del otro”, afirmó.
Uno de los primeros en salir a criticar la decisión de la actual istración distrital fue el exalcalde Enrique Peñalosa. “Nosotros con nuestra gerente de TransMilenio María Consuelo Araújo compramos 500 buses eléctricos que llegan pronto. La alcaldesa ha dedicado mucho tiempo a lograr pintar de verde los buses azules eléctricos que compramos a ver si se apropia algo de ellos. Espectáculo”.
La concejala Lucía Bastidas (Alianza Verde) le envió el jueves pasado un derecho de petición al gerente de TransMilenio en el que solicita información sobre la decisión de pintar de verde los buses eléctricos y de gas Euro VI, y pide, entre otras cosas, explicación sobre las “razones técnicas y jurídicas de la modificación del color de los buses”.
“Ni regalados ni prestados esos recursos se deben destinar al cambio de color de buses”, dijo Bastidas, quien afirmó que en las actuales circunstancias se deben “usar
en temas sociales, como empleo, y no por capricho”.
La concejala no duda que el color verde es porque la alcaldesa quiere “poner la impronta de su partido político, eso no tiene ningún sentido”. Además, advirtió que los manuales del SITP señalan expresamente que los buses deben ser de color azul.
El presidente del Concejo, Carlos Fernando Galán (Bogotá para la gente), también aseguró que es “un gasto innecesario” y dijo que es mejor invertir ese dinero “en mejorar el servicio de energía”.
Galán recordó que los mismos que el año pasado decían que los uniformes rojos de TransMilenio eran para promover su campaña a la alcaldía, ahora “quieren pintar de verde todos los buses nuevos. Me parece que se contradicen”.
Carlos Carrillo (Polo Democrático), por su parte, dijo que había escuchado que querían pintar los buses del SITP de verde, “pero la verdad no pensé que la alcaldesa se atreviera a hacerlo”. Calificó el cambio como un gasto “innecesario y político”, y dijo que “lo único que falta es que además los pinten con el girasol y la cara de Antanas Mockus”.
La misma opinión tiene Jorge Colmenares (Centro Democrático), para quien ese gasto no se justifica en la actual coyuntura. “Espero que no sea para incentivar al partido de la alcaldesa (...). La alcaldía tiene que explicar por qué y para qué se cambia de color”, dijo el concejal.
La explicación ambiental de TransMilenio
Felipe Ramírez, gerente de la empresa de TransMilenio, explicó que una de las banderas de esta istración es mejorar la operación del sistema de transporte público y el medioambiente de la ciudad, y dentro de esa estrategia se enmarcan los buses eléctricos, que son “un paso muy importante para los bogotanos”.
Ante las críticas por la relación del nuevo color de los buses con el partido Alianza Verde, dijo que el verde tiene un significado ambiental y que en este caso no tiene nada que ver con el partido de la alcaldesa.
Explicó que los buses eléctricos y a gas Euro VI se pintarán de ese color para que “la ciudad empiece a ver el cambio de esta flota que está ayudando al medioambiente y que empiece a ver que, en efecto, hay un cambio importante para los bogotanos”.
GUILLERMO REINOSO RODRÍGUEZ
Editor de Bogotá
@guirei24
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