Ministra de Justicia defendió captura de 'Araña' como obligación del Gobierno por circular roja

Como un entrampamiento calificó el alto comisionado Otty Patiño la captura de alias Araña, máximo cabecilla del grupo armado 'Comandos de la Frontera', al cierre del tercer ciclo de negociaciones con el Gobierno. Una afirmación que fue refutada por la ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, quien aseguró que la captura se dio en cumplimiento de la ley, atendiendo la circular roja de Interpol en su contra.

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En declaraciones públicas, la Ministra afirmó que "había una orden de Interpol, que se traduce en una orden de captura internacional. Nosotros hacemos parte del sistema Interpol y desde ese punto de vista, la Fiscalía lo que hizo fue cumplir con esa orden". 

A las instalaciones del Hotel Marriott Courtyard, en Bogotá, llegaron agentes del CTI, el pasado 12 de febrero, para detener a Giovanny Andrés Rojas, alias Araña. El jefe de uno de los grupos que compone la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano, una estructura residual de la 'Segunda Marquetalia', está siendo requerido por la Corte del Distrito Sur de California (Estados Unidos) por cargos relacionados con narcotráfico. 

De acuerdo con la circular roja, 'Araña' seguía delinquiendo mientras estaba sentado en la mesa de diálogo, razón por la que fue aprehendido con fines de extradición.

Este hecho inusual, comparado con el caso de 'Jesús Santrich', quien también fue detenido por supuestos nexos con los carteles mexicanos para enviar cocaína a Estados Unidos, abrió un debate político-jurídico sobre el cumplimiento de los tratados internacionales y la protección de quienes han realizado acercamientos con el Estado para dejar las armas.

Dentro del mismo Gobierno, las aguas están divididas. Por un lado, desde la oficina del Alto Comisionado y el equipo negociador aseguran que este operativo ordenado por la Fiscalía hiere de gravedad los diálogos de paz, no solo con la 'Coordinadora', sino también con otros grupos, como el 'Clan del Golfo', que buscan soluciones pacíficas al conflicto y que verían minada su confianza.

Mientras tanto, desde el Ministerio de Justicia defienden la captura como una decisión coherente con el cumplimiento de la ley, especialmente considerando que proviene de un convenio internacional.

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"No es una orden proferida internamente, por lo que no es un proceso que se esté ventilando en Colombia. Para nosotros, los tratados, las convenciones y los convenios son obligatorios de cumplir por el principio de la reciprocidad para efectos de justicia", dijo Buitrago, respaldando la actuación de la Fiscalía, bajo el liderazgo de Luz Adriana Camargo.

Tras la captura, el principal punto de discusión será la extradición de 'Araña', lo que para algunos expertos dilapidaría la política de 'paz total' que adelanta el presidente Gustavo Petro con una docena de grupos armados, cuya disputa se ha agudizado en los últimos años. 

Aún falta que Estados Unidos haga la solicitud formal, cuya aprobación ya no será competencia de la rama judicial, sino del Ejecutivo. 

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"Si el trámite de la solicitud avanza el Presidente puede denegar la extradición o puede hacer uso de la figura de extradición diferida, la cual implica justificar que en este proceso los señores de la 'Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano' tienen el compromiso de firmar un acuerdo, dejar las armas y responderle a las víctimas", explicó el investigador de la Fundación Ideas para la Paz, Gerson Arias.

Redacción Justicia