Mesa de negociación con la 'Segunda Marquetalia' de 'Iván Márquez' se instalará en junio

Durante la plenaria del Consejo Nacional de Paz de este viernes, el consejero comisionado para la Paz, Otty Patiño, habló sobre la instalación de la mesa de negociación con la 'Segunda Marquetalia', grupo de desertores del acuerdo de paz de 2016 al mando de alias 'Iván Márquez', y aunque no dio una fecha concreta, sí confirmó que está próxima a instalarse.

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No obstante, fuentes cercanas al proceso le confirmaron a EL TIEMPO que en junio dicho proceso de negociación dará inicio. Se espera que durante la primera semana del mes se empiecen a dar los acercamientos para tener definiciones claras de cara a la segunda semana, cuando el proceso podría arrancar.

El primer paso para que eso ocurra será la confirmación de la delegación de Gobierno, la cual, estará integrada por seis personas.

Como lo adelantó este diario el pasado 19 de mayo, el propósito es tener una voz cercana al santismo. El objetivo es claro: darle legitimidad a un proceso que ha sido cuestionado por los firmantes del acuerdo de paz de 2016 –en la ley de ‘paz total’ el senador Humberto de la Calle intentó que se aprobara un artículo que prohibía negociar con traidores del acuerdo, como él señaló a ‘Márquez’– y tener un esquema parecido al de los otros espacios de conversación en curso, es decir, con una voz crítica dentro de la mesa.  

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Hay que recordar que la delegación del Ejecutivo es liderada por Armando Novoa García, un reconocido jurista cuya carrera a nivel público comenzó en la constituyente de 1991, siendo este uno de los asesores de la Alianza Democrática M-19.

Del lado de la 'Segunda Marquetalia', son doce los delegados que aparecen en los decretos firmados por el presidente Gustavo Petro, de los cuales, a nueve ya se les levantaron las órdenes de captura.

Pero más allá del anuncio, el proceso de negociación con este grupo es complejo, pues, existen obstáculos sobre los cuales no hay claridad.

Como lo indica la base jurídica de la JEP, es decir, la Ley 1957 de 2019, aquellos que firmaron los compromisos de La Habana y luego abandonaron el proceso no podrán recibir ningún beneficio del acuerdo. Pero la tesis bajo la cual sustenta el Gobierno el inicio de esta negociación es que en el acuerdo no existe limitación para que los desertores ingresen a nuevos procesos, algo que no es del todo claro, según varios analistas.

No obstante, fuentes cercanas al proceso han manifestado que el interés del Gobierno es adelantar un proceso de negociación rápido que no arranque desde cero, sino que tenga como base los temas que se trataron en La Habana.

REDACCIÓN POLÍTICA