La palabra celulitis suele ser una de las más temidas dentro del universo femenino, una de las eternas batallas a la que se enfrentan las mujeres en algún momento de sus vidas. Taparla, ocultarla, a veces se hace hasta lo imposible para disimularla, pero lidiar con ella no suele ser un reto fácil y muchas veces es en vano porque sigue ahí, no se va. Sin embargo, existen formas de combatirla o retrasarla.
Según datos de Europa Press, entre un 90 y 98 por ciento de las mujeres padecen este fenómeno en alguna etapa de su vida.
Y frente a esta situación, el ejercicio físico se convirtió en uno de los indiscutidos aliados, una alternativa que colabora en el proceso de reafirmar la piel y quemar la grasa que se acumula por debajo y que produce hoyuelos.
El desafío pasa por fortalecer o tonificar las piernas, especialmente los abductores, es decir, la parte alta e interna de las extremidades, tratándose de una de las zonas más afectadas por esta condición que suele mostrar sus primeras apariciones durante la adolescencia.
“La celulitis es una alteración en el tejido celular subcutáneo, se localiza arriba del músculo y debajo de la piel y es acompañada de un almacenamiento de grasas, retención de líquidos, fragilidad capilar y variación en la microcirculación”, explica Clarisa Rodríguez, médica dermatóloga del Centro de Dermatología Dr. Eduardo Rodríguez (Edra), de Buenos Aires.
Y la razón por la que aquella área es más propensa a verse afectada por esta patología radica en que “tiene una alta cantidad de receptores hormonales que hace que se depositen mayores niveles de grasa y que se genere una matriz extracelular”, comenta la especialista.
Y a la hora de desencadenarse, son muchos los factores que confluyen.
Según Rodríguez, el disparador principal es la genética, una condición inevitable de eludir y modificar. A su vez, hace alusión a un desorden hormonal o bien al sedentarismo y la alimentación, pero a diferencia del punto anterior, a estas dos cuestiones se las puede intervenir.
Trabajar los abductores
Si bien se trata de una parte del cuerpo específica, hay muchas formas para entrenarla.
Francisco Piperatta, preparador físico, conocido en el mundo del fitness como el Oso Trainer, recomienda hacer ejercicios de bajo impacto, localizados y de fuerza utilizando el peso corporal, como así también sumándole carga e incluso bandas elásticas.
En paralelo, también sugiere practicar aeróbico, desde caminatas hasta elíptico, bicicleta o zumba con un mínimo de tres veces por semana durante 30 a 40 minutos.
“La variedad de actividades para hacer es ilimitada y con base en esto, lo fundamental es que cada persona encuentre lo que mejor le siente de acuerdo con sus características y condiciones físicas”, comenta el entrenador y remarca que trabajar este sector del cuerpo también aporta otra serie de beneficios paralelos: fortalece los músculos, mejora el equilibrio, la postura y, en consecuencia, ayuda a prevenir lesiones.
Para Alejandra Hintze, médica deportóloga e integrante de la comisión directiva de la Asociación Argentina de Médicos del Deporte, hay dos hechos trascendentales que hacen que la celulitis se note menos: que la persona tenga poca grasa sobre el músculo y una buena musculatura, es decir, tonicidad que se logra haciendo trabajo de fuerza.
A su vez, los especialistas consultados hacen hincapié en que el entrenamiento debe estar acompañado por una buena nutrición, basada principalmente en el consumo de proteínas, un alimento que ayuda a reducir la grasa corporal y que define su estructura.
“Todo lo que ingerimos repercute en la piel, para bien o para mal, una dieta equilibrada, consciente y variada es otro de los pilares fundamentales de este proceso y que va a colaborar en mantenerla sana”, dice el entrenador.
Y tampoco hay que descuidar la hidratación a base de agua ya que “durante los entrenamientos el cuerpo pierde mucho líquido fomentando que la piel se reseque y pierda elasticidad”, explica Piperatta.
Ahora bien, para todos los supersticiosos sobre lo que hay que evitar para que este fenómeno no aumente, Hintze derriba mitos y comenta que si bien las actividades de impacto y alta vibración como, por ejemplo, el running pueden llegar a estimular esta condición porque potencian el movimiento de la piel, “es importante remarcar que la celulitis es un proceso natural del cuerpo que se da con el avance del tiempo, entonces lo mejor es mentalizarse y no privarse de hacer deportes que siempre va a ser más beneficioso que el sedentarismo”, reflexiona la deportóloga.
¿Cómo combatirla?
El Oso Trainer brinda ejemplos de actividades para combatir y prevenir la celulitis, y recomienda que cada uno maneje el peso y la intensidad de acuerdo con lo que mejor se adapte a sí mismo. Además, insiste en la importancia de cuidar la postura durante todo el proceso para evitar posibles lesiones y dolores.
Ejercicios y consejos
Avanzadas
- Separar los pies en ancho de caderas.
- Mantener una postura erguida con la vista puesta en el frente y los brazos sobre la cadera para no perder el equilibrio.
- Avanzar hacia adelante dando pasos con las piernas flexionadas.
- Alternar los movimientos.
- Se puede sumar un poco de carga utilizando mancuernas.
Sentadillas con banda elástica
- Ubicar la banda a la altura de las rodillas para generar un mayor trabajo de fuerza.
- Separar las piernas un poco más del ancho de caderas.
- Bajar lo máximo posible con la espalda recta y la vista puesta en el frente.
- Llevar las rodillas hacia afuera asegurándose de que no pasen las plantas de los pies.
Patada con tobilleras
- Colocarse una tobillera en cada pierna.
- Ubicarse con las palmas de las manos y plantas de los pies en el piso (‘en cuatro patas’) asegurándose de estar en línea recta.
- Estirar una pierna a 90 grados y dar pequeñas patadas hacia arriba.
- Alternar las piernas.
- También se puede realizar con una estirada o ubicándose de manera lateral
MELANIE SHULMAN
La Nación (Argentina) - GDA
@LANACION
PUBLICADO EN LA EDICIÓN IMPRESA DEL DOMINGO
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