En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Noticia
Dos gemelas víctimas de desplazamiento le apuestan a la reconciliación con noticiero en Chocó
Las jóvenes destacan noticias positivas de resiliencia en un barrio vulnerable del departamento.
Yucely y Yacely Córdoba Salas tienen un noticiero comunitario en Quibdó. Foto: Usaid -OIM
Si no fuera por la leve diferencia del peinado, Yucely y Yacely Córdoba Salas parecerían, físicamente, la misma persona. Estas gemelas carismáticas, que van contando su vida con ese atrevimiento que dan los 18 años, tienen andando en Quibdó, Chocó, un noticiero comunitario dedicado a destacar noticias positivas que ocurren en medio del contexto difícil de un barrio vulnerable en la ciudad.
Su niñez transcurrió en el campo, en Tagachí, un municipio a más de cinco horas de Quibdó navegando por el río. Recuerdan que su casa, como las de los demás, estaba paralela a la margen del río Atrato, pero tuvieron que abandonarla al ser desplazadas junto a su familia.
“Mi mamá nos ha sacado adelante a pesar de las circunstancias. Aunque mi papá le daba para la leche y los pañales, eso no era suficiente y ella ha tenido que trabajar en casas de familia para darnos educación y todo lo que necesitamos. Cuando nacimos, al ver que éramos dobles, se asustó, pues mantener a dos hijas en medio de la pobreza es difícil. Sin embargo, ella nos ha sacado adelante y nos ha dado ejemplo”, contaron.
Como desplazadas llegaron a Quibdó, capital del departamento, y su juventud transcurrió en el barrio El Reposo, un lugar que reúne todas las contradicciones y carencias de una sociedad: falta de oportunidades, déficit de servicios públicos, pobreza y poco a la educación. Se trata de un sector desvalido que se formó después de la masacre de Bojayá, a donde llegaron muchos sobrevivientes que huían de la violencia. Hoy allí hacen presencia pandillas y grupos armados, que siembran zozobra y buscan seducir a los jóvenes para que se les unan.
Comunicación, acción y poder
Yucely y Yacely Córdoba Salas tienen un noticiero comunitario en Quibdó. Foto:Usaid -OIM
En medio de la desesperanza, para las gemelas se abrió un camino con una propuesta de comunicación que ha traído un poco de quietud y paz a este barrio: “Nosotras con dolor hemos visto morir a nuestros amigos, vecinos. Hemos despedido a muchos que han caído por nada. Le damos gracias a Dios porque no nos ha dejado desviar de una ruta de bien. Pero no es fácil porque uno se levanta todos los días tratando de pensar en qué hacer. En cómo pasar el tiempo, en cómo mejorar la vida”, contaron.
Al tiempo agradecieron la creación del Semillero de Comunicaciones, Acción y Poder (SCAP), “en el que buscamos a través de videos y acciones visibilizar las buenas narrativas de nuestro barrio. Esos videos los publicamos en Facebook y a veces los proyectamos en el salón comunal”.
Yucely y Yacely cuentan que todo empezó un día que una profesora llegó contando de una convocatoria que buscaba a personas que les gustara la narración y la comunicación, y aunque ellas eran introvertidas, la profesora las escogió. “No sé qué vio en nosotras, pues éramos muy introvertidas, casi mudas, no socializamos con nadie. Lo bueno es que nos llamó”, comentan entre carcajadas.
Tras ese llamado, las jóvenes se capacitaron en el manejo de la cámara, los micrófonos y en ver cómo podían hacer noticias que impactaran, sin mostrar lo malo que pasaba en el vecindario.
A los primeros guiones que hicieron, como ellas afirman, les faltaba vida, sentimiento. Pero pudo más su dedicación. Se dieron a la tarea de imitar a los periodistas, recorriendo las tiendas, visitando a los vecinos y empapándose de esa realidad que, aunque la veían todos los días, les era ajena para la noticia. Así les llegó la inspiración y empezaron a rescatar a personajes sencillos y a destacar los hechos positivos que se ocultaban en las calles de su barrio.
Nosotras creemos que lo que nos ha hecho avanzar es el deseo y el convencimiento de que se necesita una transformación social: Yacely y Yucely Córdoba Salas
“Nos percatamos de que en el vecindario había anécdotas, personas y cosas bonitas que merecían ser contadas. Muchas habían pasado desapercibidas, porque casi nadie tenía tiempo de escuchar y ver que no solo éramos violencia. Poco a poco, descubrimos otro barrio que no habíamos visto. Así mismo, se nos quitó el susto y la timidez. También llegó la motivación para otros jóvenes que se nos fueron sumando. Al poco tiempo, ya nos veían como las jóvenes del noticiero. Hemos realizado videos sobre jóvenes resilientes, acciones comunitarias y torneos deportivos. También hemos hecho cortometrajes con historias que inspiran a otros para cumplir sus sueños”, contaron las gemelas.
Hoy en día ellas son reconocidas como lideresas juveniles, un término que tienen que las compromete con seguir avanzando hacia una transformación. “A esa palabra hay que tenerle respeto. Pero bueno, si somos lideresas, no nos queda más remedio que cumplir. Nosotras creemos que lo que nos ha hecho avanzar es el deseo y el convencimiento de que se necesita una transformación social”, dijeron.
Lo importante es que los jóvenes seamos capaces de ponernos en los zapatos de los demás, y que no perdamos de vista que somos agentes de cambio, y que los sueños los podemos alcanzar: Yacely y Yucely Córdoba Salas
Su colectivo ha trascendido las barreras de su barrio para impactar a otros jóvenes y ahora han conformado un grupo que practica una comunicación empática y amable. “La gente nos busca para que contemos todo lo hermoso que pasa a nuestro alrededor. Que mostremos que no todos somos violentos, con nuestras notas impulsamos la reconciliación y la paz, no solo de nuestro barrio, sino del país”.
Yucely y Yacely insisten en que en la juventud está la clave de la resiliencia, la reconciliación y el diálogo constructivo.
“El propósito de nuestro trabajo es contribuir con un granito de arena a motivar a los jóvenes para que sigan sus sueños y se alejen de la guerra. Si nosotras pudimos, otros también. Lo importante es que los jóvenes seamos capaces de ponernos en los zapatos de los demás, y que no perdamos de vista que somos agentes de cambio, y que los sueños los podemos alcanzar”, concluyeron.
*Esta historia hace parte de la campaña Súmate a la Reconciliación, promovida por el programa Restaurando Nuestro Futuro de Usaid, implementado por OIM en alianza con ACDI/VOCA, para la conmemoración del 9 de abril, Día de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas.