En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

CLUB VIVAMOS
Suscríbete
Disfruta de los beneficios de El Tiempo
SUSCRÍBETE CLUB VIVAMOS

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo [email protected] no ha sido verificado. Verificar Correo

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión

Hola, bienvenido

¿Cual es la ciudad colombiana clasificada como la más peligrosa del mundo?
¿Cómo va el juicio al expresidente Álvaro Uribe?
¿Accidente de bus en Calarcá?
Frío inusual en Bogotá explicado por el Ideam

¿Abortos?

¡Ser mujer siempre ha dolido! Pariendo, abortando o negándonos a concebir, no tenemos salida.

Alt thumbnail

Actualizado:

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon
Uno. Ser demasiado joven no me impidió sentirme segura de que nunca sería mamá, aunque estuviera enamorada hasta los huesos del padre de mi posible hijo, un muchacho con el que creí que me casaría y moriría de vieja. Me le medí sin dilemas y sin consultarle, a sabiendas de que ese silencio sería un hecho aún más violento. Quería correr con la total responsabilidad de mi decisión y lo hice así, impulsada por mi rebeldía y mi ambición de ser yo misma, dispuesta a pagar el precio emocional que la vida me cobrara por mi libertad. Sabía que el no tener ninguna duda sobre lo que haría no evitaría en mí el dolor de aquella pérdida, pero no me castigaría por desafiar una moral que todavía parece vengarse de la mujer.
Quince días antes de conocer mi estado, ya sentía un cansancio sobrenatural; “tengo algo raro”, le dije a mi amiga más cercana, quien enseguida me aconsejó hacerme una prueba de embarazo.
Dio positivo y actuamos pronto. Ella me acompañó a una clínica de mujeres, un lugar con todas las condiciones necesarias para garantizar la eficacia del procedimiento, frecuentemente practicado allí, según la versión de las enfermeras. No se trataba de un sitio clandestino, pero fue evidente que no controvertían ese servicio en particular.
Abortar, aunque yo lo considere defendible, es un acto violento, como también lo es dar a luz
Antes de la operación me entrevistó un médico. Cuando me preguntó por mis motivos le contesté la simple verdad: “Porque no quiero tener hijos”, y eso bastó. Fue rápido y grotesco. Un tubo de aspiradora me hurgaba el estómago como un roedor, algo de no repetir.
Al siguiente día tuve que juntar trozos de alma para armar una cara decente y sacarla a la calle, mientras mis entrañas y mi corazón sangraban, porque abortar, aunque yo lo considere defendible, es, como dije más arriba, un acto violento, como también lo es dar a luz. Lo brutal no está en la asociación absurda con un asesinato, sino en la embestida frontal del prontuario triste de pecadoras y culpables que nos ha humillado durante siglos.
¡Ser mujer siempre ha dolido! Pariendo, abortando o negándonos a concebir, no tenemos salida; de todos modos condenamos a la humanidad a morir o a no existir, y ese principio existencial y fatal del pecado es el que cargamos solo las mujeres como una lápida en esta historia misógina narrada por hombres. Ahora tenemos la oportunidad de reescribirla, y esta vez, por respeto a nosotras mismas, no vamos a desperdiciarla.
MARGARITA ROSA DE FRANCISCO

Sigue toda la información de Opinión en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.

00:00
00:00

Comentar

Whatsapp iconFacebook iconX iconlinkeIn iconTelegram iconThreads iconemail iconiconicon

Conforme a los criterios de

Logo Trust Project
Saber más
Sugerencias
Alt thumbnail

BOLETINES EL TIEMPO

Regístrate en nuestros boletines y recibe noticias en tu correo según tus intereses. Mantente informado con lo que realmente te importa.

Alt thumbnail

EL TIEMPO GOOGLE NEWS

Síguenos en GOOGLE NEWS. Mantente siempre actualizado con las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en Google News.

Alt thumbnail

EL TIEMPO WHATSAPP

Únete al canal de El Tiempo en WhatsApp para estar al día con las noticias más relevantes al momento.

Alt thumbnail

EL TIEMPO APP

Mantente informado con la app de EL TIEMPO. Recibe las últimas noticias coberturas historias y análisis directamente en tu dispositivo.

Alt thumbnail

SUSCRÍBETE AL DIGITAL

Información confiable para ti. Suscríbete a EL TIEMPO y consulta de forma ilimitada nuestros contenidos periodísticos.