Tecnología en las ambulancias

Nos dejó mucha tristeza la noticia de la mujer de 70 años que falleció dentro de una ambulancia debido a que el conductor, en lugar de llevarla directo al hospital, se fue a su casa a hacer una vuelta y se demoró en su llegada para que ella recibiera los tratamientos necesarios para salvar su vida.

Esto hace preguntarse por qué las ambulancias en nuestro país no tienen aplicaciones para que su trabajo sea monitoreado. Hay aplicaciones que sirven para esto, pero no sé si se están usando. Por qué no instalar un GPS en cada ambulancia para que los supervisores puedan seguir sus desplazamientos.

También se podrían usar aplicaciones que dan las mejores rutas para llegar a los destinos escogidos como Google Maps o Waze para que al ser consultadas por los conductores puedan llegar en el menor tiempo posible. Esto también les permitiría a los supervisores insinuarles las mejores rutas o prevenirlos de problemas que les puedan hacer llegar tarde a su destino.

También vale la pena mencionar el uso de la inteligencia artificial. Esta tecnología en el sector de la salud y medicina se ha desarrollado bastante y con muy buenos resultados. Entonces ¿por qué no se han instalado estas aplicaciones en las ambulancias, para que los médicos que estén en ellas puedan obtener rápidamente los tratamientos más adecuados para el paciente que están trasladando?

Se comenta que las ambulancias no solo están transportando pacientes sino artículos que no tienen nada que ver con su función. Se ven pasar pitando por diferentes calles y el ciudadano se hace la pregunta de si llevan o no un paciente. Creo que llegó el momento de usar la tecnología para que estos vehículos hagan su trabajo en forma clara y rápida, beneficiando a los enfermos. Con la tecnología se puede medir el tiempo que se demoran en llegar a donde son solicitadas y en llevar al paciente al hospital, y así llevar bitácoras que permitan asegurar su buen uso y funcionamiento. Sé que hay aplicaciones que hacen esto, se deberían empezar a usar lo antes posible.

El presidente Petro, según él, nunca tiene la culpa de nada. Culpa a los médicos, a las farmacéuticas, a los empresarios, etc. No se da cuenta de que es él quien tiene al país al borde de la quiebra o a los enfermos sin sus drogas. Pero sigue echando discursos que hacen que los colombianos nos reventemos de la risa, por lo chistosos.

GUILLERMO SANTOS CALDERÓN

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