Miedo, culpa, estrés, depresión y ansiedad son algunos de los impactos emocionales que genera un diagnóstico de una enfermedad crónica incurable que va a acompañar a los pacientes para toda la vida: la diabetes. Así lo dieron a conocer los expertos durante el Foro Diabetes, una enfermedad silenciosa ¿Cómo prevenirla y detectarla a tiempo?, un espacio de conversación para entender cómo manejar y prevenir esta enfermedad.
De acuerdo con la Cuenta de Alto Costo, al 31 de agosto de 2023 se informaron 1.860.370 casos de diabetes en el marco del aseguramiento en Colombia. Mientras que según datos de la Federación Internacional de Diabetes (FID), en el mundo, el 10,5 por ciento de las personas entre 20 y 79 años tienen diabetes, y aproximadamente el 90 por ciento de estos casos corresponden a la diabetes tipo 2.
Bajo este panorama, expertos como Katherine Restrepo, presidente de la Asociación Colombiana de Endocrinología, Diabetes y Metabolismo; Pablo Aschner, director Científico de la Asociación Colombiana de Diabetes; Carlos Salamanca, gerente médico del área cardiovascular y diabetes en Sanofi; Erika Montañez, directora de la Fundación Voces Diabetes Colombia; Henry Tovar, expresidente de la Asociación Colombiana de Endocrinología; y Ricardo Hernández, cardiólogo especialista de Cleveland Clinic, conversaron sobre las generalidades de la diabetes en el país.
“La diabetes es una enfermedad metabólica que se caracteriza por una elevación de la glucemia o de la azúcar en sangre y básicamente se produce por una deficiencia en la producción de insulina o porque la insulina que se produce no actúa adecuadamente y esto lleva a que se puedan presentar las complicaciones de nuestros pacientes”, explicó Katherine Restrepo, presidente de la Asociación Colombiana de Endocrinología.
Aunque la diabetes es un diagnóstico que puede ser impactante para las personas, la clave, de acuerdo con profesionales de la salud y expertos, está en entender la enfermedad para saber cómo actuar y gestionarla.
“Hay tres ejes fundamentales cuando ya hay un diagnóstico: primero, conocer cómo están sus niveles de glucosa, porque el monitoreo, saber cómo están mis niveles de glucosa me ayuda a saber qué tan bien controlada o no está la enfermedad y con eso también ayuda a la toma de decisiones en el proceso clínico con el equipo médico tratante”, sostuvo Carlos Salamanca, gerente médico del área cardiovascular y diabetes en Sanofi. El segundo eje tiene que ver con la adopción de estilos de vida saludables tales como actividad física, nutrición o adherirse a un plan nutricional para controlar la diabetes.
“A veces la diabetes no viene sola, viene con hipertensión, con colesterol elevado, entonces todo esto debería manejarse también desde un punto de vista nutricional. Y el tercer eje es la medicación, entender que la medicación debe estar acompañada o soportada de un equipo médico tratante, evitar la automedicación”, agregó Salamanca.
Frente al impacto emocional que sufren las personas luego de recibir un diagnóstico de diabetes, los expertos coincidieron en que esta es una enfermedad que afecta desde diferentes frentes, tanto a pacientes como a sus familiares.
“Indudablemente, un diagnóstico de una enfermedad crónica que va a acompañar por toda la vida a nuestro paciente impacta tener que hacer cambios en hábitos de alimentación. Impacta también el poder compartir en familia, compartir en sociedad. Hay un impacto muy importante que puede llevar a tasas de ansiedad de hasta un 30 por ciento y depresión de hasta un 22 por ciento en los pacientes con diabetes. De allí la importancia de hacer el manejo integral de ellos”, sostuvo Restrepo, presidente de la Asociación Colombiana de Endocrinología, Diabetes y Metabolismo.
La culpa también juega un rol importante. De acuerdo con Carlos Salamanca, un diagnóstico de diabetes genera ciertas sensaciones de duda y cuestionamientos frente a lo que pudo haber fallado para evitar llegar a esa enfermedad. Este sentimiento, además, no solo afecta a pacientes, sino que se da especialmente en los familiares de niños que son diagnosticados con diabetes tipo 1.
Por esta razón, y como punto clave para contrarrestar estos síntomas, la educación se vuelve protagonista, pues ayuda a disminuir la ansiedad, el estrés, también minimiza el estigma y el señalamiento que gira alrededor de la diabetes.
“En la medida en la que el paciente y su familia entiendan que la diabetes no se cura, pero sí se controla; y que tengan claro cómo lograr un buen control, y que eso a su vez va a evitar las complicaciones que realmente es lo que más deteriora la calidad de vida, inclusive acorta la vida, pero que se pueden evitar, en esa medida yo diría que se disminuye la ansiedad, porque la principal razón de ansiedad es no saber para dónde va uno”, puntualizó Salamanca.
Además de la educación, apersonarse, adueñarse de la enfermedad y empoderarse de manera individual, para entender en qué consiste la diabetes, cómo tratarla, conocer las metas metabólicas que debe llevar, sin dejar toda la responsabilidad del cuidado a familiares, también resulta clave a la hora de querer controlar y contrarrestar los efectos de la enfermedad.
“La persona con diabetes a veces también delega todo en su familia, entonces si él no está haciendo la dieta adecuada es por culpa de su familia o de la persona que le cocina, que le pone lo que no toca, y eso no es así. La persona con diabetes tiene que apersonarse, empoderarse para manejar su problema desde todo punto de vista, incluyendo lo que tiene que ver con la salud”, afirmó Pablo Aschner, director Científico de la Asociación Colombiana de Diabetes.
Hábitos saludables, una medida preventiva
Indudablemente, al escuchar el sinnúmero de repercusiones que trae a la salud una enfermedad crónica como la diabetes, podría aumentar y generar mayor temor de padecerla, sin embargo, otra de las grandes conclusiones de este foro fue la importancia de tomar medidas preventivas y hacer un cambio de chip, con el fin de garantizar la salud de las personas.
“La gente se puede asustar mucho al escuchar las complicaciones, pero la primera advertencia que hay que hacer es que en caso de la diabetes tipo 2, más del 80 por ciento de las complicaciones son prevenibles, por eso la Federación Internacional de Diabetes hace un llamado en el tema de bienestar, pensando en que la modificación de los estilos de vida hacen y generan una mejor salud y bienestar en la sociedad”, puntualizó Erika Montañez, directora de la Fundación Voces Diabetes Colombia.
A este llamado de cambiar los hábitos, se sumó la opinión del doctor Ricardo Hernández quien también advirtió que, especialmente en la diabetes tipo 2, mucho
tiene que ver con el estilo de vida, situación que puede controlarse y prevenirse.
“La comida chatarra, como papitas, dulces y refrescos ha provocado que en Estados Unidos haya una incidencia más alta de diabetes tipo 2 en los niños, algo que antes no se veía, y eso es culpa de los padres y culpa de la sociedad y del ambiente en el que vivimos. Pero sin duda, es algo que podemos controlar 100 por ciento, al limitar los carbohidratos, limitar las comidas procesadas; hacer más ejercicio, solo con caminar, darle dos o tres vueltas a la manzana todos los días ayuda a que el cuerpo procese mejor, que sea más sensible a la insulina, que procese mejor las azúcares”, dijo Hernández.
Obesidad, uno de los mayores detonantes
Un dato que llamó la atención durante el foro es que, a nivel mundial, entre el 60 - 70 por ciento de las personas diagnosticadas con diabetes están en sobrepeso u obesidad, cifras alarmantes que demuestran que esta condición es detonante de otras enfermedades.
“Indudablemente, el sobrepeso y la obesidad son enfermedades que detonan otras patologías crónicas, como la diabetes, hipertensión, colesterol, problemas de hígado graso, de anemia del sueño, problemas articulares, es decir, si yo tengo sobrepeso u obesidad no debo esperar a sentirme mal, sino que debo consultar preventivamente para hacer una evaluación completa y mirar cuál es el impacto que tiene ese sobrepeso y obesidad en mi salud”, precisó Katherine Restrepo, presidente de la Asociación Colombiana de Endocrinología, Diabetes y Metabolismo.
De acuerdo con un estudio reciente del doctor Juan Manuel Arteaga, en Bogotá, con más de 8 millones de habitantes, el 65 por ciento de la población tiene sobrepeso u obesidad.
Así, el llamado desde los expertos es a comenzar con “cambios muy pequeños, como limitar la cantidad de carbohidratos y hacer un poco de ejercicio, para hacer un cambio grande en nuestra salud y ser conscientes de eso puede evitar muchos problemas cardiovasculares y muchos problemas de todas las consecuencias de la diabetes a largo plazo”, concluyó Hernández.
MÁS CONTENIDO*. Un proyecto de Contenidos Editoriales Especiales de EL TIEMPO con el auspicio de Sanofi.