Gaia, nuestra madre tierra, nos está recordando con unas llamaradas de fuego que están borrando a California que el calentamiento global es una realidad. California es una de las regiones más importantes del imperio, un Estado país que se ha arrodillado frente a un fenómeno natural que sin piedad está destruyendo el hogar de millones de personas.
El calentamiento es global es una realidad ignorada por la mayoría de los gobernantes del mundo y de los dueños del dinero. Mientras Jeff Bezos, Musk y compañía se gastan millonadas para unos viajes de minutos en el espacio más cercano, siguen siendo cómplices de la contaminación atmosférica, ignorando este fenómeno, sin gastar algo de su enorme cantidad de dinero para dotar de filtros antiemisión de gases contaminantes a las industrias sucias. Y no apoyando una transición energética que sería la salvación a medida que la emisión de gases de efecto invernadero cubren nuestra Tierra, que tiene unas reglas muy estrictas y unos límites que hay que respetar.
El calentamiento global causa el aumento de la temperatura media de los océanos y de la atmósfera terrestre, y por ende del planeta entero. La mayor parte de la comunidad científica asegura que hay más del 95 % de certeza de que el calentamiento es causado principalmente por la emisión de CO2 y por la creación de nuevas fábricas que siguen utilizando para su funcionamiento combustibles fósiles.
El Gobierno de Estados Unidos va a necesitar toda la ayuda posible de los aliados para lograr una tarea casi imposible.
Conozco Los Ángeles y es una de mis ciudades favoritas por ser la patria del cine mundial y por la belleza de sus barrios y de su gente, y me hacen mucho efecto estas imágenes de las colinas de Hollywood amenazadas por un incendio, que es imposible apagar, especialmente ahora cuando están soplando los vientos de Santa Ana a 100 o hasta 150 km/h.
Lloro por la ciudad de los Ángeles, tengo amigos que han visto quemarse frente a sus ojos el hogar de toda la vida; amigos de la industria que quedaron desempleados de un momento a otro, pero pienso que esta tragedia será la salvación de los migrantes que se agolpan en las fronteras de Estados Unidos.
El señor Trump ahora necesitará de centenares de millares de trabajadores para la reconstrucción de las ciudades destruidas. Los migrantes que estaban a punto de ser expulsados ahora serán llamados a trabajar para reconstruir. El Gobierno de Estados Unidos va a necesitar toda la ayuda posible de los aliados para lograr una tarea casi imposible.