"Sancho, dejad que los perros ladren, es señal de que cabalgamos". Es Tanta la jauría alrededor de la reforma de la salud que me he preguntado insistentemente la razón de esta actitud desconfiada hacia las EPS que tiene el Pacto Histórico. Entonces, investigando los escándalos de las grandes EPS, se destaca la alegre istración del señor Palacino en Saludcoop y la millonada que se perdió: más de 400.000 millones.
Aquí, unos datos con ayuda de IA, y otras fuentes para entender mejor. La Contraloría afirma que Carlos Palacino y su equipo habrían desviado 1,4 billones de pesos, el juicio fiscal más grande del país. Hay para mil tomos, da para una serie. En menos de diez años, Carlos Palacino construyó la empresa más grande de la salud en Colombia.
Muchas de sus ideas eran seguidas y copiadas por EPS, hospitales y empresas del sector por su forma de ahorrar costos y ganar dinero. La pequeña cooperativa de servicios, Saludcoop, que se inició en 1990, engrosó la lista de las 20 empresas más grandes del país. Gracias a la promulgación de la Ley 100, en 1993, un grupo de 10 cooperativas se unió para apostarle al régimen subsidio de salud. Recibían dinero del Estado para atender a la población de bajos ingresos.
Con esos 400.000 millones de pesos que se perdieron, perfectamente habría alcanzado para pagarles a los hospitales del Estado.
Parte de las grandes sumas que ingresaban no se invertían en mejorar la atención de los s. Cuando varios de los afiliados del Seguro Social y de las otras EPS se empezaron a quejar, Palacino se la jugó por el régimen contributivo. Los s pagaban por los servicios de atención.
Con los dineros del desfalco se otorgaron préstamos a socios y trabajadores, se pagaron viajes personales, se compraron vehículos de alta gama. Se sabe el epílogo. El desfalco de Saludcoop, las prácticas fraudulentas llevaron a su intervención y liquidación por parte del Gobierno.
La cartera que le debe Saludcoop EPS a la red hospitalaria pública, a 31 de diciembre de 2021, es de 153.000 millones de pesos; repartidos en régimen contributivo, 144.000 millones; y subsidiado, 8.700 millones de pesos. "Con esos 400.000 millones de pesos que se perdieron, perfectamente habría alcanzado para pagarles a los hospitales del Estado".
Este es un ejemplo triste del manejo con los dineros de la salud. ¿Y, entonces, a quién le están ladrando, Sancho? Esta frase, que no aparece en el Quijote, se aplica perfectamente a nuestra situación de la salud, a la cual le están atacando a mordiscos la reforma.